Finanzas Empresariales
Las finanzas corporativas pueden consistir en la emisión de nuevas acciones u obligaciones, la venta de activos para cubrir los costes de endeudamiento o la celebración de otros acuerdos financieros. Generalmente se consideran un subconjunto de la gestión financiera y el análisis corporativo.
El término «finanzas corporativas» se utilizó por primera vez en la década de 1890 para describir el campo especializado del comercio de acciones y bonos. Aunque hay muchas similitudes entre las finanzas tradicionales y las prácticas actuales de las finanzas corporativas, los dos términos han evolucionado significativamente desde que se acuñaron. Hoy en día, la mayoría de las actividades de financiación de empresas tienen lugar en los mercados públicos o en los círculos de capital privado, dependiendo de si la empresa que se financia es pequeña o grande.

¿Qué son las finanzas corporativas?
Las finanzas corporativas son el complejo conjunto de actividades que tienen lugar cuando una empresa realiza transacciones para obtener capital o reducir su deuda. Pueden consistir en la emisión de nuevas acciones u obligaciones, la venta de activos para cubrir los costes de endeudamiento o la suscripción de otros acuerdos financieros. La financiación es el proceso por el cual se crea riqueza mediante activos, pasivos y empresas. La financiación de una empresa tiene en cuenta el valor de los activos y el coste del capital obtenido mediante la financiación de deuda o de capital. La financiación de una empresa tiene en cuenta el valor de los activos y el coste del capital obtenido mediante financiación de deuda o de capital. La financiación de una empresa puede ser primaria o secundaria. Una financiación primaria se produce cuando la financiación procede de la propia empresa y es a través de una oferta pública inicial (OPI), financiación mediante acciones o deuda. Una financiación secundaria se produce cuando la empresa presta dinero a otra empresa o a una entidad gubernamental.
Diferentes tipos de financiación para las empresas
Existen muchos tipos de financiación para las empresas. Empecemos por lo básico. Hay financiación de capital y financiación de deuda, ofertas públicas, acciones preferentes, financiación intermedia y financiación híbrida. La financiación mediante acciones consiste en entregar las acciones de la empresa (o una parte de ellas) a los inversores, que luego las utilizan para comprar más acciones o deuda de la empresa. Esto suele hacerse mediante una oferta pública inicial (OPI). La financiación mediante deuda se produce cuando la empresa pide un préstamo, a menudo con intereses.
Fusiones y adquisiciones
Aunque la mayoría de las empresas pasan por un proceso de financiación corporativa antes de realizar una inversión significativa, algunas adquieren empresas o startups mediante financiación de deuda o capital. Esto puede hacerse de dos maneras: adquirir y luego adquirir. La primera es cuando el adquirente ya está en posesión de los bienes o servicios. La segunda es cuando el adquirente contrae una nueva deuda para adquirir los bienes o servicios.
Servicios financieros para empresas en transición
A veces las empresas pasan por un proceso de reestructuración cuando se ven presionadas por acreedores o inversores, o cuando quieren hacer cambios fundamentales en su forma de operar. Durante un proceso de reestructuración o reducción de tamaño, algunas empresas pueden necesitar vender activos o realizar una transacción que les permita cumplir los pactos de deuda o realizar inversiones de capital. En estos casos, una financiación mediante deuda puede ser una buena opción. El prestamista puede proporcionar financiación de la deuda a un tipo de interés bajo mientras la empresa se reestructura o reduce su tamaño. La deuda puede utilizarse para pagar el pasivo corriente o realizar inversiones de capital durante el proceso de reestructuración.
Teoría de la gestión financiera y las finanzas empresariales
Las finanzas son una actividad de gestión estratégica que puede afectar al curso de una organización. La teoría de la gestión financiera explica cómo las empresas toman decisiones y cómo pueden mejorar sus resultados financieros. La teoría de las finanzas corporativas se basa en la idea de que las empresas necesitan dinero para crecer y seguir existiendo. Las empresas también tienen obligaciones con sus accionistas, clientes y otras partes interesadas que deben tenerse en cuenta a la hora de tomar decisiones estratégicas.
En resumen
Hay muchas razones por las que una empresa puede necesitar financiación mediante deuda, como cuando experimenta un déficit de tesorería, un aumento de los gastos, cambios en el entorno empresarial o cambios en el sector. A la hora de decidir cómo financiar un proyecto o una expansión, las empresas pueden analizar la importancia de los objetivos y cuánto esfuerzo requeriría alcanzarlos. Por ejemplo, una empresa puede decidir ampliar su negocio en 1 millón de dólares, pero necesita encontrar 50 millones en efectivo. En este caso, encontrar financiación mediante deuda es más fácil que encontrar una forma de financiar el proyecto sin deuda. Otra razón por la que la financiación de la deuda puede ser beneficiosa para una empresa es si quiere obtener capital de un tercero pero no quiere hacer una oferta pública. Esto puede hacerse de varias maneras, por ejemplo vendiendo una inversión de capital para fines especiales o un certificado de opción de compra (warrant) que dé al titular el derecho a comprar la inversión de capital a un precio determinado en el futuro.