
Ética en los negocios
La ética nos define, define nuestra personalidad, nuestra disciplina, principios, valores, ideales, etc. Sin embargo, el término es un tanto complejo, ya que lo que puede ser “bueno o malo” para alguien, puede no serlo para otra persona. Fuimos criados y educados de manera distinta, crecimos en familias y entornos distintos, desde niños captamos “lo correcto” o “incorrecto” según lo que nuestros padres nos dieron a entender.
Pero: ¿la ética en que influye en los negocios? En la mayoría de las empresas o emprendimientos necesitamos de un equipo, clientes, compañeros, y en muchas ocasiones nuestro comportamiento ético o valores pueden diferir a los suyos.
Un ejemplo podría ser útil aquí: Eres un joven que decidió entrar al mundo de la política, eres honrado y honesto y te ofrecen el puesto que siempre has querido y deseado, pero a cambio tú debes cubrir ciertos fraudes fiscales. En este caso ¿nos dejamos llevar por la malicia o decidimos conservar nuestra postura?
Aquí dejaré una sugerencia, y es que la ética y la moral es lo que nos define cómo personas, nos da incluso una imagen social, esto incluye claramente nuestro sector laboral. Seamos éticos no solo en nuestra vida personal, estudiantil, afectiva, nuestra dimensión profesional es de suma importancia también. De hecho, para que una empresa pueda estar dada de alta correctamente se debe presentar “misión, visión y valores”, mismos que todo miembro de la institución debe seguir sin excepción alguna.
Muchos lugares de trabajo incluso siembran una cultura de “valores bíblicos”, así como: honrar a Dios en todo lo que hacemos, ayudar al prójimo, seguir la excelencia, crecer con ganancias, etc. Así como en el periodismo debe existir ética al momento de informar, el empresario, gerente, empleado, y emprendedor deben mostrar un compromiso no sólo consigo mismos sino también con sus compañeros, y empresa.
Para tener éxito en cualquier industria hay que ganarse el respeto de los competidores, mantener el nombre de su empresa o emprendimiento limpio, conservar sus valores y sembrar los mismos en cada miembro. La ética es parte fundamental para hacer crecer cualquier tipo de negocio, es una cuestión de credibilidad y de confianza, mientras más credibilidad y confianza genere con su cliente o consumidor es mucho más probable que regrese a consumir su producto o servicio, y en el mejor de los casos lo recomiende también.
Jerry White en su obra “Honestidad, moralidad y conciencia” nos expresa que debemos ser justos en todo lo que hacemos, no importa la jerarquía que se tenga. En el caso del empleado, deben preguntarse si realmente trabajan el tiempo y las horas completas, si están dándole el mayor provecho al sueldo que se les está pagando. Para los dueños de la empresa preguntarse si de verdad se les cumple lo que se le ofrece en el anuncio publicitario, ¿el cliente está recibiendo el máximo valor por su dinero?
La “honestidad total” hacia sus colaboradores o clientes. Es por ello por lo que debemos preguntarnos si somos lo suficientemente honestos al momento de informar acerca de nuestro uso del tiempo, manejo del dinero y logros, por ejemplo.
Podemos concluir con que debemos asumir completa responsabilidad de las decisiones que tomemos, sea el puesto que tenga. Alguien que ofrece servicios o productos honestos, éticos y honrados atraerá clientes honestos, éticos y honrados.