El significado de “empowerment” viene de “power” que significa “poder” que prácticamente significa “dar poder”.

Es una forma o herramienta que incluye la distribución del poder, autoridad, autonomía y responsabilidades, otorgando o traspasando a los trabajadores o equipos de trabajo de la empresa, para que puedan tomar decisiones, solucionar problemas o realizar tareas sin consultar o esperar la aprobación superior.

No se trata de abolir el sistema jerárquico de la empresa o abandonar al jefe, sino de construir trabajadores y subordinados más creativos, productivos y de mayor calidad bajo un modelo corporativo descentralizado. Este es un compromiso con la agilidad y la diversidad, no con centralizar el poder del proceso, porque todos los cambios deben ser aprobados por los superiores.

Por lo tanto, debes confiar en las personas y darles libertad. Así como la motivación es importante, es reconocer el buen desempeño, celebrar el logro de metas y lograr resultados fructíferos.

Es importante recordar que al permitir que más trabajadores se empoderen, sus habilidades se pueden utilizar mejor. Además, no se debe olvidar que el empleado más cercano a la acción o problema es el que mejor puede tomar una decisión.

Para imponer un empowerment en la empresa, es necesario avanzar en diferentes áreas, lo que traerá beneficios a corto plazo. En primer lugar, debe verificar los recursos disponibles para la empresa y analizar a los empleados para comprender qué pueden ofrecer y cuál es su potencial. Esto le permitirá conectar sus talentos con sus metas. Para ello, el equipo debe poder intercambiar información libremente.

También es necesario comprender el punto de partida, la disposición de los trabajadores y su resistencia al cambio, y tomarse un tiempo para prever posibles obstáculos cuando los profesionales comiencen a responsabilizarse de su trabajo y sentirse responsables.

El empowerment están revolucionando la organización de las empresas y haciéndolas más horizontales. Por tanto, es necesario avanzar hacia este modelo organizativo para no perder competitividad. Sin embargo, para que tenga ventaja en todas las empresas, la cultura empresarial debe estar alineada con este enfoque. De esta forma, la implantación de la estructura será más natural y exitosa.

El mundo empresarial persigue la fórmula adecuada para aumentar la productividad y la rentabilidad sin reducir la calidad y el talento en el proceso. El empowerment es una respuesta a los principales problemas que deben afrontar las empresas tradicionales en materia de recursos humanos.